Enredado, preso de sus errores pero también de sus aciertos. Así lució el sábado por la noche el futsal de Trama, que consiguió apenas un punto al igualar 5 a 5 ante un conjunto de bajo vuelo como Argentinos, en condición de local.
Lo que más llamó la atención fue el sube y baja de rendimiento que exhibió el Ciclón ya que empezó con todo, jugando con ganas y goleando al Bicho 4 a 0, con dos goles de Marco Escobar (cada día más consolidado), uno de Gonzalo Matos y otro de Gramuglia.
Empero, en el segundo tiempo se quedó dormido y el de La Paternal comenzó a generar daño y descontó en dos ocasiones. El local no reaccionó y se mostró totalmente abatido, sin ideas y cometiendo errores en defensa y perdiendo bolas increíbles en ataque. Esa situación fue aprovechada, obviamente, por su rival, que siguió metido en el encuentro y lo dio vuelta.
¿Por qué a este equipo azulgrana le sucedió semejante situación cuando siempre se destacó por su enorme actitud para jugar los cuarenta minutos? ¿Por qué el nivel bajó totalmente? ¿Qué hubiera pasado si enfrente en vez de Argentinos estaba Pinocho? Las respuestas solo las tiene el plantel y cuerpo técnico, que si quieren aspirar a algo importante no deben cometer equivocaciones tan ostensibles.
Recién con el 5 a 4 en contra, el Cuervo atinó a hacer algo y arrinconó a su contrincante. Llegó con peligro y el uno rival sacó varias bochas aunque, en los últimos segundos, no pudo detener un remate de Matos y el cotejo finalizó en un empate que, por como se dio el pleito, para el de Boedo tuvo sabor a derrota.
