San Lorenzo igualó 2 a 2 ante 17 de Agosto de visitante tras ir perdiendo 2 a 0 y mantuvo el liderazgo del Apertura con 29 puntos. Sobre el final estuvo muy cerca de ganarlo.
En cancha difícil, San Lorenzo mostró la chapa del puntero y sigue sin conocer la derrota en este 2010. El conjunto que dirige Oscar Trama fue hasta la calle Albarellos para enfrentar a un duro rival como 17 de agosto y terminó igualando en dos goles en un encuentro vibrante.
El resultado final es mentiroso ya que el Ciclón fue el autentico protagonista de la noche del viernes, dominando la bola (por cierto, nueva, porque se estrenó la Adidas Jabulani muy liviana), generando situaciones y cerrando caminos hacia el arco de mono Gramuglia.
Además, fue inteligente tácticamente en todo momento pero el gol no llegó al principio del pleito. Guariniello tuvo una chance, Gimenez le pegó afuera y Ferreyra tiró y se la sacó el arquero. 17 de agosto, el local, esperó para jugar de contra y no ofreció más que eso. El primer tiempo dejaba, entonces, a un solo conjunto disconforme con el marcador.
En el segundo acto llegaron las emociones. A los pocos minutos, el dueño de casa encontró el primer tanto por medio de un disparo de media distancia que se desvió y descolocó a Gramuglia. Y, momentos más tarde, también por la misma vía, se puso 2 a 0. Para los Gladiadores, esto era un baldazo de agua fría, no merecían sufrir tal cachetazo.
Sin embargo, se tranquilizaron y comenzaron a jugar mejor que antes. Trama, para equilibrar la situación, dispuso en cancha a hombres rápidos más la compañía del muro Stazzone en el fondo. Mal no le salió: arrinconó al quinteto de Pueyrredón en su campo y contó con situaciones de marcar claras.
Cuando restaban cinco minutos para el final, Stazzone se animó reventar el arco contrario y la bola fue directamente a besar a la red. Fue el descuento aunque, claro está, los de Boedo fueron por más. Siguieron con la misma tesitura y a poco del cierre llegaron a la igualdad.
La jugada del 2 a 2 fue magnifica. Empezó con Stazzone que se la tocó a Pablo Felder (de buen rendimiento) y este se la cedió con precisión al pollo Guariniello. El pivote cuando la recibió decidió tocarla suavemente al segundo palo para gritarlo con todo.
Obviamente, la llegada al tanteador deseado no aminoró la marcha del azulgrana que, con respuestas físicas amplias, decidió ir por los tres puntos y casi los consigue sobre el cierre, a un minuto del fin.
Pablo Felder tomó la pelota sobre la banda izquierda y le pegó con alma y vida aunque, increíblemente, el uno rival la manoteó y conservo el resultado. Así, se acabó la historia, con un empate que claramente dejó disconforme a una escuadra y fue festejado por otra.
Una, está tercera, cómoda. La otra, sigue puntera e invicta en once fechas.
